Ungido con propósito
"El Espíritu del Señor está sobre mí,Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;A pregonar libertad a los cautivos,Y vista a los ciegos;A poner en libertad a los oprimidos". S. Lucas 4:18
No cualquiera puede predicar el evangelio, para que éste sea creído necesitas ser ungido. Antiguamente Dios derramaba el aceite de la unción (aceite Santo) para apartar y comisionar a personas para diferentes funciones. Sólo esas personas recibían el poder de lo Alto y el respaldo de Dios para cumplir con su obra. Hoy en día, no puede ser menor el estándar de Dios, él necesita apartar a personas en quienes pueda confiar su santa unción, si somos apartados, seremos capaces de llevar a cabo esta misión con gran responsabilidad y poder, necesitamos ser ungidos y distinguidos para ser fieles con este propósito y que la gente lo vea y se admire de lo que Dios hace con personas comunes.
¡Apártate para Dios! Y recibirás poder de lo Alto para abrir el corazón de muchos para recibir el evangelio del Señor Jesús.
Oración:
Apártame Señor para tus planes y propósitos, quiero servirte y honrarte. En el nombre de Jesús, amén.
Por Pastor Javier Loza